El progreso de la ilustración está siendo fuerte y presente. La imagen, muy lentamente, va ganando espacio al texto ¿Será la influencia de un mundo digital mucho más visual e ilustrado? Cualquiera sea el motivo, la verdad es, que cada vez hay más gente que dibuja, aunque ser un buen dibujante no siempre implique ser un buen ilustrador. La ilustración es parte de un proceso de comunicación en el que intervienen otros elementos, que son, la esencia de este libro.
Este libro proporciona, además de nociones técnicas, una visión global y renacentista de la actividad del ilustrador. No es anecdótico que pueda extenderse en aspectos aparentemente colaterales como la ergonomía del espacio de trabajo o las relaciones contractuales, así como las experiencias de los expertos o la aproximación a los mercados. Esos son precisamente los aspectos que marcan la diferencia entre el ilustrador y quien solo dibuja.
Este manual está dedicado por entero a la ilustración como arte y, sobre todo, como medio de vida. Cada capítulo está acompañado de entrevistas a importantes profesionales del sector o personas que dirigen y encargan el trabajo de los ilustradores. Encontrará herramientas para trabajar, observar, comparar, pensar y motivarse a ser diferente y destacar. Conviértase en un transmisor de ideas y recorra el camino de los ilustradores.