Pocas trayectorias, si alguna, tan singulares en la poesía española del siglo XX como la recorrida por José Ángel Valente (1929-2000), círculo que parecen cerrar con una perfección tan espontánea como secreta sus primeros versos (“Cruzo un desierto y su secreta / desolación sin nombre”) y los últimos (“Cima del canto. / El ruiseñor y tú / ya sois lo mismo.”). Hostil a todo gregarismo en su búsqueda de un espacio poético insobornable y propio, Valente erigió con lucidez y constancia a lo largo de su obra -articulada en torno al silencio, el pensamiento, la pasividad fértil y el canto- una de las cimas indiscutibles de la lírica española moderna, de la cual esta antología es una muestra tan iluminadora como estimulante.
Selección y prólogo de Tomás Sánchez Santiago