En el 500 aniversario de la primera vuelta al mundo, ‘El beso de los océanos’ cuenta la odisea de aquella travesía a través de los ojos de un grumete que sirvió en la nave de Fernando de Magallanes
Una historia emocionante y terrible en la que Juan de Santander, un chico cántabro, parte siendo un niño de doce o trece años y madura hasta convertirse en un adulto tras dejarse la piel en el navío y descubrir el amor y la amistad. ‘El beso de los océanos’ narra su viaje vital en una aventura que empezaron más de 250 hombres y solo terminaron él y otros 17 marinos. El muchacho aprenderá de la arrolladora personalidad del almirante Fernando de Magallanes, de la audacia de Juan Sebastián Elcano, del valor de Gonzalo Gómez de Espinosa y se verá inmerso en las luchas entre marinos portugueses y castellanos por hacerse con el mando de la expedición.
Todo ello, con el telón de fondo de los enfrentamientos entre las grandes potencias marítimas de la época: Castilla y Portugal, que pugnaban por dominar las rutas comerciales de las especias, que en el s.XVI eran más valiosas que el oro o la plata; entre Carlos I de España y Francisco I de Francia por obtener el favor del Papa León X para hacerse con la corona del Sacro Imperio Romano Germánico, y entre los oficiales de la Casa de Contratación de Sevilla por controlar las riquezas que ya comienzan a llegar del Nuevo Mundo. Terribles luchas entre los más poderosos que acaban arrastrando a los más humildes, como Aldara, una niña mendiga que sobrevive en las calles de Sevilla y que tras ayudar al protagonista a enrolarse en la armada de Magallanes se ve envuelta en un asesinato para tapar una trama de corrupción oficial.
‘El beso de los océanos’ es historia de motines a bordo, deserciones, traiciones, descubrimientos, asesinatos y, sobre todo, de supervivencia y superación.