Cuando los espectaculares avances tecnol贸gicos de nuestros d铆as nos han facilitado el acceso al conocimiento como nunca hasta ahora, que vivamos m谩s y mejor, que el “tercer mundo” se desarrolle…, cuando por primera vez se podr铆a conducir a la humanidad hacia una era de libertad y progreso, el mundo parece ir en direcci贸n opuesta, hacia la destrucci贸n de todo lo conseguido. 驴C贸mo hemos llegado hasta aqu铆?
Hace unos a帽os, Amin Maalouf nos hablaba de que “nuestras civilizaciones se agotan” en “El desajuste del mundo” y en “Identidades asesinas”, y aportaba las razones: la desconfianza hacia el “Otro”, la xenofobia, la intolerancia pol铆tica y religiosa, el populismo, el individualismo y la insolidaridad del nacionalismo, el racismo… Hoy en d铆a ya nos habla directamente de “naufragio inminente”.
No hay a帽oranza de un pasado mejor en sus palabras, solo le preocupa el futuro de esta “茅poca desconcertante”, el porvenir de las nuevas generaciones, que pueda desaparecer lo que ha dado sentido a la aventura humana. Tampoco se deja llevar por el pesimismo ni quiere predicar el desaliento, solo hace una llamada l煤cida a la responsabilidad colectiva, dejando entreabierta la puerta de la esperanza a que el mundo vuelva a orientarse, ya que como escribi贸 en su novela “Los desorientados”: “M谩s vale equivocarse en la esperanza que acertar en la desesperaci贸n”.