https://hablamosdelibros.es/producto/erasmo-hombre-de-mundo-evasivo-suspicaz-e-impertinente/177719Erasmo, hombre de mundo: evasivo, suspicaz e impertinenteErasmo de Rotterdam, el erudito más influyente de su tiempo, dedicó toda su vida a construir una imagen de sí mismo que lo reflejara como un intelectual íntegro y como una persona guiada por una nueva educación ("humanitas y civilitas") basada en la piedad cristiana y en el deseo de paz universal. En 1523 se definía a sí mismo como amante de la verdad, fiel en los afectos, desdeñador del dinero y reluctante a las polémicas, no menos que sereno en el hablar. Sin embargo, como suele ser habitual en las personalidades complejas, los comportamientos no coinciden siempre con las intenciones. En 1524, un Erasmo crecido en sus convicciones (entre otras cosas) por la bienquerencia demostrada por varios papas se atreve a escribir en estos términos contra un impresor que ha osado publicar un libro crítico: "Si tiene hijos que alimentar, ¡que mendigue!, ¡que prostituya a su mujer!, pero que no publique libros que atentan contra mí, contra las buenas letras, contra el Evangelio y que traerán a la ciudad de Estrasburgo toda la maldad de los herejes". Por mucho esfuerzo que hagamos hoy, siempre nos será difícil entender los motivos y los valores bajo los que actuaban las lumbreras del siglo XVI.https://hablamosdelibros.es/wp-content/uploads/2023/09/CA00349301-600x929.jpg19.95instockLiteraturaLiteratura contemporánea00.000https://hablamosdelibros.es/wp-content/uploads/2023/09/CA00349301-300x300.jpg824659828198283824719826119.950.000.002023-04-22T07:23:31+02:00
Erasmo, hombre de mundo: evasivo, suspicaz e impertinente
Erasmo de Rotterdam, el erudito más influyente de su tiempo, dedicó toda su vida a construir una imagen de sí mismo que lo reflejara como un intelectual íntegro y como una persona guiada por una nueva educación (“humanitas y civilitas”) basada en la piedad cristiana y en el deseo de paz universal. En 1523 se definía a sí mismo como amante de la verdad, fiel en los afectos, desdeñador del dinero y reluctante a las polémicas, no menos que sereno en el hablar. Sin embargo, como suele ser habitual en las personalidades complejas, los comportamientos no coinciden siempre con las intenciones. En 1524, un Erasmo crecido en sus convicciones (entre otras cosas) por la bienquerencia demostrada por varios papas se atreve a escribir en estos términos contra un impresor que ha osado publicar un libro crítico: “Si tiene hijos que alimentar, ¡que mendigue!, ¡que prostituya a su mujer!, pero que no publique libros que atentan contra mí, contra las buenas letras, contra el Evangelio y que traerán a la ciudad de Estrasburgo toda la maldad de los herejes”. Por mucho esfuerzo que hagamos hoy, siempre nos será difícil entender los motivos y los valores bajo los que actuaban las lumbreras del siglo XVI.
Erasmo de Rotterdam, el erudito más influyente de su tiempo, dedicó toda su vida a construir una imagen de sí mismo que lo reflejara como un intelectual íntegro y como una persona guiada por una nueva educación (“humanitas y civilitas”) basada en la piedad cristiana y en el deseo de paz universal. En 1523 se definía a sí mismo como amante de la verdad, fiel en los afectos, desdeñador del dinero y reluctante a las polémicas, no menos que sereno en el hablar. Sin embargo, como suele ser habitual en las personalidades complejas, los comportamientos no coinciden siempre con las intenciones. En 1524, un Erasmo crecido en sus convicciones (entre otras cosas) por la bienquerencia demostrada por varios papas se atreve a escribir en estos términos contra un impresor que ha osado publicar un libro crítico: “Si tiene hijos que alimentar, ¡que mendigue!, ¡que prostituya a su mujer!, pero que no publique libros que atentan contra mí, contra las buenas letras, contra el Evangelio y que traerán a la ciudad de Estrasburgo toda la maldad de los herejes”. Por mucho esfuerzo que hagamos hoy, siempre nos será difícil entender los motivos y los valores bajo los que actuaban las lumbreras del siglo XVI.
Puedes contactar con nuestro departamento de Atención al Cliente en en el e-mail clientes@grupoanaya.com o a través de nuestro formulario de contacto.
CONTACTE
Si ets docent, contacta amb el nostre departament d’Atenció al Client a través de l’e-mail clientes@grupoanaya.com oa través del nostre formulari de contacte.
Contacto
Se es docente, ponte en contacto co noso departamento de Atención ao Cliente no correo electrónico clientes@grupoanaya.com ou a través do noso formulario de contacto.
Esta web utiliza cookies para que podamos ofrecerte la mejor experiencia de usuario posible. La información de las cookies se almacena en tu navegador y realiza funciones tales como reconocerte cuando vuelves a nuestra web o ayudar a nuestro equipo a comprender qué secciones de la web encuentras más interesantes y útiles.
Cookies estrictamente necesarias
Las cookies estrictamente necesarias tiene que activarse siempre para que podamos guardar tus preferencias de ajustes de cookies.
Si desactivas esta cookie no podremos guardar tus preferencias. Esto significa que cada vez que visites esta web tendrás que activar o desactivar las cookies de nuevo.
Cookies de terceros
Esta web utiliza Google Analytics para recopilar información anónima tal como el número de visitantes del sitio, o las páginas más populares.
Dejar esta cookie activa nos permite mejorar nuestra web.
¡Por favor, activa primero las cookies estrictamente necesarias para que podamos guardar tus preferencias!