“¿Qué podía hacer Julia? El matrimonio de sus padres se venía abajo; Jorge, su mejor amigo, estaba celoso porque ella pasaba algunas tardes estudiando en casa de Kike. Y por si eso fuera poco, había presenciado un asesinato y nadie quería creerla. Pero no podía quedarse cruzada de brazos y permitir que un delito como aquél quedara impune.”
Esta web utiliza cookies para que podamos ofrecerte la mejor experiencia de usuario posible. La información de las cookies se almacena en tu navegador y realiza funciones tales como reconocerte cuando vuelves a nuestra web o ayudar a nuestro equipo a comprender qué secciones de la web encuentras más interesantes y útiles.