“La creencia duradera en una enfermedad imaginaria, ¿puede, en sí misma, ser una enfermedad?”
H. Ey (1966)
“Siempre he tenido la sensación de que la oscuridad en el tema de la hipocondría era una desafortunada laguna de nuestra teoría.”
S. Freud (“Carta a S. Ferenczi”)
Aunque la preocupación excesiva por la salud es un fenómeno frecuente tanto en sanos como en enfermos, el estudio de la hipocondría continúa siendo poco explorado. Quienes se ven más afectados por este problema suelen ser clientes habituales de médicos, internistas y especialistas diversos, que con frecuencia no pueden dar respuesta a sus quejas. En este libro se plantean cuestiones como si existe o no un trastorno hipocondríaco, cómo se diagnostica y qué explicaciones psicológicas existen para esos comportamientos. La obra se enmarca en una visión cognitivo-conductual que ofrece un tratamiento satisfactorio de la hipocondría, a menudo muy incomprendida.