Tras la muerte del señor Dashwood, su viuda y sus tres hijas, Elinor, Marianne y la pequeña Margaret, deben abandonar sus posesiones en Norland al heredar sólo el hijo mayor, fruto de un anterior matrimonio. Unos familiares las acogen en Barton Cottage, donde deberán aprender a vivir en condiciones mucho más modestas de las que conocieron. En medio de estas circunstancias, Elinor y Marianne descuben el amor. Marianne, más romántica, se abandona a los impulsos del corazón con sus incontenibles entusiasmos que desembocan en el desencanto y en la desesperación. Elinor, en cambio, sigue los dictámenes de la razón y mantiene un admirable dominio de sí misma al enfrentarse con sus sufrimientos amorosos.
Esta web utiliza cookies para que podamos ofrecerte la mejor experiencia de usuario posible. La información de las cookies se almacena en tu navegador y realiza funciones tales como reconocerte cuando vuelves a nuestra web o ayudar a nuestro equipo a comprender qué secciones de la web encuentras más interesantes y útiles.