Todas las noches un padre le cuenta un secreto a su hija. Algo que le ocurrió de pequeño y que siempre le sirve de excusa para enseñarle que todo en la vida puede tener varias lecturas.
Hace mucho tiempo se me perdió una pelota. Cuando me puse a buscarla entre las plantas de casa, de repente me di cuenta de que me encontraba en la selva. Allí vi monos, cocodrilos, boas y ¡hasta a un hombre orquesta!, pero mi pelota no aparecía…