Qué mejor forma de aprender el abecedario que jugar con las palabras. Personajes de cuentos y libros infantiles conviven en estas páginas: Alicia, Blancanieves, Caperucita, Pinocho o Rapuncel, entre otros, en las situaciones más variopintas.
En este disparatado libro todo es posible, la única regla la dicta el orden del abecedario.